25 oct 2009

Après la pluie, le beau temps (El título fue una contribución de M.)

Hoy pensé mucho en ella.

Esos domingos en los que no se sabe bien que hacer. Comencé por dejarme los pijamas puestos, combinarlos con zapatillas y remera nueva.
Eh! Este cuarto es una mugre, aspiradora en mano, la extremidad del tubo donde corresponde… en el piso aspirando. Blem para el escritorio, Cif y papel de diario para los vidrios. Gilberto Gilun al máximo.

Estos últimos días hablamos poco y nada, y fue por una discusión que tuvimos. Si mal no recuerdo, era por algo que dijo, y que después nunca pasó y tampoco aclaró porqué, hasta que se lo pregunte yo.

Tenia un RedBull en la heladera, y junto al cigarrillo Lucky que le afane a mi hermana, me senté en mi reposera mirando el canal.
Fumando mi cigarrillo en soledad, miraba como la casa vecina ordenaba toda la joda de ayer que duro hasta las 6.30am.

Y en su momento escribí cosas hirientes y descargadoras sobre ella y su partida a Europa, pero hoy en día eso es pasado y hablado.
Hoy en día podría decirse que somos amigos. Pero esos amigos que quizás nadie logra entender, nadie excepto las partes involucradas.
En fin, el pensamiento en concreto era que yo nunca le diría a nadie que es una amiga, sino una ex novia, y que nos llevamos bien. Incluso si alguna mujercita apareciera en mi vida y me pidiera que corte una amistad así, lo haría sin dudarlo.


Mi viejo trajo un lomo, pan, PeCsi, Patty. Todas esas cosas en plural claro. Cocine, esta vez en jogging Adidas, con las mismas zapatillas para la flia. Rico.
Ayude a atar unas glicinas en el deck de casa, y continué con la descarga pirata de una película llamada “Horsemen”. Dura, pero buena.

Quedamos en juntarnos esta semana a comer algo y hablar de la vida. Básicamente para hablar. Y no, no hay intenciones ocultas detrás de “juntarnos a comer”. Con Mariana por suerte lo único que quedo de largas y tendidas peleas, fue la sinceridad.
Entonces si uno de los dos dice “vamos a tomar un helado”, no se piensa más que en ir a tomar un helado. De igual manera funciona para otras cosas. Se dice lo que se quiere hacer y se ve que pasa.
Las decepciones, mentiras, engaños sin sentido, triple engaños, vueltas rebuscadas en el mundo de Alicia y el país de las maravillas…. Eso, se lo dejamos para aquellos que aun no se conocieron y nunca pasaron por esto.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Palabras que no podemos retener, al igual que la lluvia se escurre en un vaso de papel mojando el universo. La pena y la alegria son solo estados temporales de nuestra mente, se terminan, aunque regocijen, aunque apenen. Luces rotas nos incandilan, solo quieren que recordemos aquello que buscamos olvidar. Esos torpes pensamientos tropiezan ciegamente intentando abrirse camino esperando algun dia perderse en la infinidad. Nadie cambiara nuestra historia. La nuestra.

Après la pluie, toujours le beau temps.