Como cubo, guardando toda la información dentro, pero con las 6 caras hacia el exterior, dando la mejor cara. Sólo unos pocos saben realmente que pasa con los secretos de estado. Algunos otros los intuyen. Y como suele pasar, están aquellos que divulgan la información por medios de comunicación.
Esa elite en Europa que odia ver a sus propios ciudadanos drogados. De a poco se van alejando de sus influencias, ya que ven menos cosas en común. Lo que antes era un “de vez en cuando”, ahora es “¿cuándo no?”. Y lo quieren controlar, pero es inevitable el disgusto y el rechazo que se les nota en la cara, cuando estos se acercan. Y no pueden hacer demasiado para revertir la situación. Solo queda mudarse de país, o de barrio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario